Go to Top

Obispo diocesano

MONS. JOSÉ IGNACIO MUNILLA AGUIRRE

José Ignacio Munilla Aguirre nace en San Sebastián el 13 de noviembre de 1961. Inició los estudios eclesiásticos en el Seminario Mayor de Toledo y los concluyó en San Sebastián. Obtuvo la licenciatura en Teología, especialización en Espiritualidad, en la Facultad de Teología del Norte de España, sede de Burgos. Fue ordenado sacerdote en San Sebastián, por Mons. José María Setién, el 29 de junio de 1986. El 24 de junio de 2006 fue nombrado Obispo Palencia y tomó posesión de la Diócesis el 10 de septiembre de 2006. El 21 de noviembre de 2009 fue nombrado Obispo de San Sebastián, tomando posesión de la Diócesis el 9 de enero de 2010. El 12 de febrero de 2022 toma posesión como obispo de la Diócesis de Orihuela-Alicante.

CARGOS PASTORALES

Desempeñó su ministerio pastoral como sacerdote en Zumárraga: 1986-1990 como vicario parroquial en la Parroquia Asunción de Nuestra Señora. En 1990 es nombrado párroco de El Salvador hasta el 2006 que es ordenado obispo. Participó como miembro del Consejo Presbiteral de la Diócesis, por dos cuatrienios, en representación su arciprestazgo.

Durante el trienio 2005-2008 fue miembro de la Comisión Episcopal para la Vida Consagrada. Desde 2008 y hasta 2013 fue miembro de la Comisión Episcopal de Apostolado Seglar (Subcomisión de Juventud).

De 2011 a 2013 entró a formar parte de la Comisión Episcopal de Medios de Comunicación Social. El 13 de marzo de 2014, en la CIII Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española, quedó de nuevo adscrito a la Comisión Episcopal de Medios de comunicación Social. En la reunión plenaria del Consejo de Conferencias Episcopales Europeas (CCEE) que se celebró en Saint Gallen, Suiza, del 27 al 30 de septiembre de 2012, fue nombrado Presidente de la Comisión de Comunicaciones Sociales de los obispos europeos. Cargo que ha desempeñado hasta el 2016.

LEMA EPISCOPAL

El lema episcopal de Mons. Munilla es «In Te confido» (En Ti confío) y su escudo episcopal está centrado en la imagen del Corazón de Jesús. La imagen del corazón quiere representar la humanidad de Jesucristo como camino hacia Dios. Las llamas que envuelven el Corazón representan el Amor de Dios, el Espíritu Santo. Así como Moisés contempla la zarza que arde y no se consume con las llamas, así las llamas del Divino Amor arden en el Sagrado Corazón sin consumirlo, convirtiéndolo en un horno de caridad divina, que desea abrasar con sus llamas a todas las almas humanas, para encenderlas en el fuego del Amor a Dios. El Sagrado Corazón aparece también rodeado de espinas, formando una apretada corona que lo ciñe a su alrededor y aparece con su costado abierto, del cual fluye, de modo ininterrumpido, Agua y Sangre: Agua, que lava las almas y Sangre, que las santifica. El corazón con la corona de espinas y la representación de la llaga del costado, hacen una clara referencia a la Pasión de Cristo. El fuego representa el amor redentor de Dios hacia todos los hombres. La expresión del lema «In Te confido» tiene su referencia en distintas citas bíblicas, tales como: Sal 50,10; 24,2; 56,2; Rom 14,14; Jer 17,5.7.

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *